- Confianza en mí misma: Cuando llegué a Londres venía muy segura de mi misma porque más o menos siempre he conseguido todo lo que me he propuesto, pero al llegar a mi nueva ciudad con su idioma y modos de hacer diferentes, todas mis seguridades se desvanecieron, porque no era capaz de hacer nada por mi sola (primero porque no sabía leer lo que era cada cosa, segundo porque hasta los grifos y ventanas tenían mecanismos diferentes, tercero porque no sabía dónde comprar las cosas que necesitaba o si su precio era razonable teniendo en cuenta el alto nivel de vida de Londres, después todavía no tenía amigas ni gente conocida con quien quedar y contar mis preocupaciones o ilusiones... entendí cómo se sentían los inmigrantes al llegar a una ciudad diferente a su lugar de origen).
La verdad es que los primeros meses estuve bastante agobiada por no saber decir lo que necesitaba o lo que pensaba, por no poder tener amigas de verdad (pues no podía contar mis cosas ni comprender lo que me decían), y me parecía que no hacía bien mi voluntariado porque no entendía bien las indicaciones que me daban. Pero al tiempo me dí cuenta de que desde que nacemos, poco a poco vamos aprendiendo a ser personas, a interactuar con el mundo y la sociedad que nos rodea y a mejorar nuestro entorno con las competencias que por nuestra personalidad y desarrollo vamos consiguiendo... eso que yo había aprendido poco a poco en España, ahora necesitaba tiempo para poder adaptarlo a Londres (ya digo que no es sólo saber el idioma, es también saber cómo se hacen las cosas aquí, cómo se viven las fiestas, cómo se responde al teléfono, cómo son los planes de domingo...). Decidí que a partir de ahora (más o menos 4 meses después de llegar) iba a preguntar todo lo que dudase aunque pareciese tonta, iba a contar todo lo que pensaba aunque no supiese transmitirlo y iba a exponerme a ambientes británicos que hasta entonces había tratado de evitar por vergüenza (médico, banco, tiendas, preguntar direcciones en la calle, preguntar opinión y dar la mía en el voluntariado...). De momento el resultado está siendo bastante positivo, la gente me ayuda más y al preguntar el motivo me dicen que ahora se dan cuenta de que tengo verdadero interés por aprender y también les mueve ver cómo batallo con mi "Spaninglish", en las tiendas y llamadas de teléfono me hablan despacio y hasta se ofrecen a explicarme por escrito... y yo ahora disfruto de todo muchísimo más.
- Competencia lingüística: No hace falta explicar cómo se puede mejorar un idioma si se usa diariamente durante un año... pero lo mejor es que ahora para mí el inglés tiene mucho más sentido que cuando lo estudiaba sin éxito durante los 12 años de colegio... entonces me servía para pasar exámenes, ahora para comunicarme con personas, aprender de su experiencia y animar con mi ejemplo.
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